miércoles, 14 de enero de 2009

Los "raros" que viven Punta del Este en motorhome

Por: Fernando Soriano Fuente: PUNTA DEL ESTE. ENVIADO ESPECIAL
CLARIN 14/01/09 http://www.clarin.com/diario/2009/01/14/sociedad/s-01839264.htm

Sobre la rambla Lorenzo Battle Pacheco, las torres ostentan su millonario valor con balcones, ventanales y el más esnob de los minimalismos. Los autos lujosos circulan despacio y brillantes para que nadie se pierda de verlos. A metros de allí -en la otra vereda-, no hay mucho más que una franja amarilla de arena y ya después el mar. Entre una imagen y la otra, cobijada por las dunas, una seguidilla de casas rodantes contrasta, inspira un impulso de resistencia. Tirados al sol o protegidos por la sombra de un toldo, allí están los turistas que prefieren veranear de un modo más romántico, a salvo de la tentación del consumo.
Los "raros" de Punta del Este son argentinos y uruguayos, una excepción sentimental en el escenario esteño. "Mirá, cada mañana muevo esta cortinita y veo el amanecer desde la cama. Sale el sol y sigo durmiendo. ¿Qué te parece?", desafía el rosarino Raúl Roche conociendo la respuesta.El y su mujer Yenny -luego sus trillizas de 21 años- hace más de 25 años que pasan vacaciones rodantes. Y desde hace una década eligen este espacio de la parada 35 de La Brava para quedarse un mes entero. Está claro que no son improvisados. Después de tantos años en la ruta, Raúl -arquitecto de 53 años- concretó el sueño: compró un micro de larga distancia y empezó adaptarlo. Hoy este motorhome es una maravilla de 27 metros cuadrados con todas las comodidades de un departamento: agua caliente, aire acondicionado, home theatre, cocina, ducha, dos dormitorios, lugar para llevar las bicicletas e incluso la parrilla (la famosa "La encontrada"), y con fuerza para tirar de un auto enganchado atrás, que les sirve para pasear. "Salimos por ahí o vamos a hacer las compras a Maldonado. No comemos afuera", aclara Yenny mientras el acordeón colgado en Raúl solloza un chamamé.A unos metros, Coco, constructor de barcos uruguayo, muestra su "hogar" bautizado "Mi objetivo" por obvias razones. "Estar acá, ver el amanecer, me hace llorar", cuenta. Raúl escucha a su colega "casillero" y asiente con una sonrisa mientras su acordeón deleita con "Kilómetro 11". "Lo fundamental es la libertad. A mí me gusta dormir más en esta cama que en la de mi casa", confiesa Raúl, que tras un instante de silencio vuelve al chamamé. De cara al mar, francamente libre.

2 comentarios:

krulcick dijo...

Quisiera saber en qué Facultad le dieron en título de ARquitecto a Raúl Roche, el rosarino de VGG.

teo dijo...

Me pregunto si este señor paga los impuestos como todos nosotros!!! me van a decir envidioso pero no me asusta porque aca tapamos el sol con la mano para ocultar lo que no queremos ver, ahora bien yo sigo disfrutando el amanecer en la vigil a orillas del rio mas ancho del mundo mi querido Paraná. Espero que de a poco tengamos las costas mas lindas para veranear, eso si con la ayuda de las multinacionales que de por cierto coparon todos los accesos a nuestras costa y nunca invirtieron ni siquiera para eliminar el famoso remanso( que hace honor a su nombre y sigue ree manso) jeje